martes, septiembre 07, 2004

Reflexionando

El cambio no es una decisión, es una etapa inherente de un ser vivo queriendo sobrevivir. Según yo, decidí cambiar, y me miro, las diferencias no son las que yo tenía planeadas. No eran estos aspectos los que quería yo cambiar. Quería dejar de quererla. Quería dejar de pensar en ella. Quería aprovechar, por fin, mis capacidades. Quería sentir que soy feliz. Quería ser mejor. Pero valió verga. Me hice un petición y me entregué otra cosa. Yo mismo cambié mis intenciones, lo que yo quería, al parecer, no era lo que en verdad necesitaba cambiar. Así que inconscientemente cambié lo justo y lo necesario como para que conscientemente notara un cambio. No todos los pinches cambios son buenos. Y vaya...